Cuando nuestros perros enfrentan una situación de agresión en la calle, es esencial saber cómo actuar para proteger su seguridad y bienestar. Este artículo explorará lo que puedes hacer si atacan a tú perro, ofreciendo consejos para una respuesta efectiva y segura.
1) Empecemos por la prevención
Conoce la zona donde vas a sacar a pasear a tu perro. Haz un recorrido por el vecindario o por posibles rutas de paseo sin tu mascota. Verifica si hay perros callejeros cerca, si otros vecinos tienen mascotas, y si hay rutas de paseo establecidas. Algunas veces, podrás obtener información valiosa sobre la zona de otros amantes de los perros o paseadores profesionales.
Además, revisa la existencia de señales de advertencia o áreas prohibidas. En algunas zonas, los residentes pueden preferir que los perros no se acerquen a sus propiedades, por lo que es importante evitar posibles conflictos. En otros lugares, podrían existir señales evidentes de la presencia de perros agresivos o propensos a la agresión.
2) Correr y ponerse a salvo
Si puedes anticipar el peligro, como la aproximación de otro perro con claras intenciones de atacar, lo mejor es que levantes a tu perro para dirigirse rápidamente a un lugar seguro donde el otro animal no pueda alcanzarlos. A pesar de que los ataques pueden ocurrir de manera repentina, hay situaciones en las que el perro agresor se encuentra a una distancia prudente, lo que te brinda tiempo para actuar.
Si tu perro es demasiado grande para cargarlo, intenten correr hacia el sitio seguro más cercano. Si bien correr podría alentar la agresión del otro perro, es la mejor alternativa para evitar estas situaciones peligrosas.
3) Está atento a las señales
Los perros emiten señales visibles cuando están molestos y dispuestos a atacar. Si un perro se acerca al tuyo con la intención de olfatearlo, pero notas que su lomo está erizado, su cola se encuentra en posición erecta, tiene la mirada fija y comienza a gruñir, es hora de alejar a tu mascota del perro agresor. Los ataques pueden ocurrir en cuestión de segundos, pero si conoces el lenguaje corporal de los perros, tendrás la oportunidad de anticipar el ataque y poner a salvo a tu mascota.
4) Trata de mantener la calma
Es comprensible que esta situación sea aterradora, pero tu lenguaje corporal puede influir tanto en el perro atacante como en tu propia mascota. Recuerda que eres el líder de la manada de tu perro, y si muestras miedo, él se sentirá indefenso. Además, si tu mascota percibe tu inquietud, es más probable que intente escapar luego de recibir alguna lesión.
5) Pide Ayuda
En muchos casos, la situación está fuera de tu control, por lo que es esencial solicitar ayuda de las personas cercanas. Con la colaboración de varios individuos, podrán separar a los animales involucrados en el ataque y evitar que el accidente pase a mayores.
6) Suelta la correa
En medio de un ataque, sostener la correa de tu perro puede perjudicar su capacidad de defensa. Aunque la idea principal es evitar el ataque a toda costa y alejar a tu perro del agresor, en ocasiones, es posible que sea demasiado tarde. En este punto, la mejor oportunidad para tu perro es liberar su correa. Esto le permitirá escapar y ponerse a salvo o defenderse por su cuenta. Además, te brindará la libertad necesaria para actuar durante el ataque y separar a los perros.
7) Defiende a tu mascota del animal agresor
Esta es la última opción, pero si el ataque es inminente, puedes intervenir físicamente para apartar al perro agresor. Sin embargo, debes estar preparado para correr el riesgo de recibir mordeduras, tanto del agresor como de tu propio perro, que podría estar tratando de defenderte.
No utilices directamente tus manos, siempre usa cualquier objeto que te pueda ayudar a separar a los perros. Antes de participar directamente puedes intentar distraer al perro agresor rociando agua a su cara o haciendo sonidos fuertes para aturdirlo.
También, podrías intentar golpear la base de la cola del perro agresor, sus testículos, su abdomen o incluso aplicar presión en su cuello para reducir su entrada de aire y lograr que cese el ataque. El objetivo no es lastimar al otro perro para dañarlo, sino tranquilizar la situación.
8) Acude de inmediato con el veterinario
Una vez que el ataque haya cesado, es crucial llevar a tu perro al veterinario de inmediato para que evalúe las heridas que pueda haber sufrido. Si su calendario de vacunación está actualizado, no deberías preocuparte por enfermedades como la rabia, a menos que el ataque provenga de un perro callejero, lo que aumentaría el riesgo de infección. Si el perro agresor tiene un dueño o responsable, asegúrate de preguntar si su mascota está al día con las vacunas. Debes esperar la evaluación del veterinario para conocer el estado de salud de tu mascota. Además, si sufres heridas, busca atención médica de inmediato para recibir tratamiento y vacunas contra la rabia.