Una vez que tengas un perro cachorro, tras una revisión veterinaria, lo próximo que debes hacer es comprar sus alimentos. Pero tanto si eres primerizo con las mascotas o te sientes perdido respecto a cómo abordar la nutrición de tu nuevo compañero, queremos dejarte algunas claves de cómo alimentar a tu cachorro. No todas las opciones de comida para perros son adecuadas para tu cachorro, por lo que es importante tomar decisiones informadas.
Cómo elegir la comida para cachorros
Muchas veces, lo mejor para alimentar a un cachorro, son las comidas procesadas diseñadas específicamente para esta etapa de sus vidas. Existen numerosas marcas en el mercado, por lo que es fundamental que revises los ingredientes que la componen y, si tienes dudas, consultes con tu veterinario.
Los perros de razas grandes pueden comer croquetas a partir de la semana 9, mientras que los perros de razas pequeñas, es preferible esperar hasta la semana 13 de vida. En tanto que no puedan comer croquetas, las fórmulas para cachorros que incluyan comida húmeda o blanda, son las más adecuadas. Progresivamente, puedes introducir una mezcla de croquetas y comidas blandas, pero con el tiempo, las croquetas pueden volverse sus favoritas y formar parte de su dieta principal.
Antes de los 6 meses, están en periodo de mudar sus dientes. Por eso los ves mordiendo sus juguetes con mayor frecuencia, ya que están por salir los dientes, y eso les causa molestias y escozor. Solo a partir de esta edad es cuando muchas razas de perros tienen dientes permanentes. Es crucial evitar darle huesos o carnes muy duras a los cachorros dentro de su comida.
La elección de la comida debe estar orientada al tipo de raza y al tamaño aproximado que esperas que tenga de adulto. Si no tienes idea de estos rasgos, puedes buscar la ayuda de tu veterinario. No obstante, por lo general, los perros de razas grandes suelen necesitar más cantidad de comida durante su crecimiento en comparación con los perros pequeños. Ten en cuenta que sobrealimentarlos o no proporcionarles la cantidad suficiente de comida durante este período, puede llevar a problemas en sus articulaciones, músculos y huesos en su etapa adulta.
Lo que debes saber acerca de la alimentación para cachorros
Algo que muchos tenedores de mascotas no toman en cuenta, pero es de vital importancia saber, es que los cachorros que adoptas ya deberían haber superado el destete.
Al nacer, los perros cachorros se alimentan primordialmente de la leche materna. A partir de las 2 semanas de edad, se puede comenzar con el proceso de destete, es decir, introducir otras comidas para cachorros, además de la leche materna. Esto hasta las ocho semanas, cuando su sistema digestivo puede hacer la transición hacia alimentos completamente sólidos.
Cualquier cachorro que adoptes debe haber superado el destete para poder alimentarlo por tu cuenta de manera adecuada. De lo contrario, tendrás que recurrir, bajo supervisión veterinaria, a una alimentación de transición para evitar posibles enfermedades. Incluso, si es posible, contactar al criador para visitar a la madre y que el cachorro se siga alimentando de ella.
Los cachorros deben ser alimentados por lo menos 4 veces al día. Esto es porque durante su crecimiento queman muchas más calorías que en el transcurso de su edad adulta. Una vez que superen los 6 meses de edad, y dependiendo de su raza, esta frecuencia puede disminuir gradualmente hasta llegar a las dos veces al día, a la que normalmente se van a acostumbrar el resto de su vida.
Es importante destacar que durante esta etapa de su vida, no se recomienda ningún suplemento alimenticio, a menos que así lo indique tu veterinario. Un desequilibrio en su nutrición, ocasionado por un consumo excesivo de ciertos elementos, puede llevar a que tu perro desarrolle enfermedades.
Cada cachorro es único y tiene necesidades distintas. Por lo tanto, es preferible consultar con el veterinario sobre cuestiones relacionadas con el tipo de comida, la cantidad y la frecuencia, para que puedas brindarle una alimentación adecuada y tengan un desarrollo saludable.
Lo que no debería comer tu cachorro
No le des leche a los cachorros, ni a los perros adultos, ya que puede causar problemas digestivos graves como inflamación intestinal, diarrea o vómitos. Además, pueden sufrir fácilmente anemia por diarrea, inclusive si no son alérgicos a la lactosa, la leche puede ser perjudicial para su estómago. Los perros pueden consumir leche en cantidades moderadas una vez que son adultos, pero siempre hay que observar su reacción.
Evita darles huesos a los cachorros, ya que su tracto digestivo es pequeño y pueden sufrir lesiones o atragantarse. A partir de los 8 meses, pueden empezar a consumir huesos de forma segura.
La comida cruda no es recomendable para cachorros debido al riesgo de bacterias y parásitos que pueden enfermarlos. Especialmente porque su sistema inmune aún está en desarrollo. Además, la comida cruda puede tener un desequilibrio nutricional, por mucho que sigas regímenes alimenticios como la dieta BARF. En esta etapa de su desarrollo, necesitan una cantidad adecuada de nutrientes, vitaminas y minerales para mantenerse sanos y activos, dado su alto gasto calórico.
