Aunque el verano generalmente coincide con las vacaciones, ofreciéndote más tiempo para disfrutar con tu mascota, es también la estación más calurosa del año, lo que requiere mayores precauciones. Quizás tengas el deseo de pasear todo el verano a tu perro, pero es esencial reconocer que hay un horario ideal para ello, donde la temperatura no afecta la salud de tu engreído.
¿A qué hora debo sacar a mi perro en verano?
La franja horaria más adecuada para salir con tu perro durante el verano, comienza a partir de las cuatro de la tarde (4 pm). Si tu mascota necesita más de un paseo al día, puedes considerar salir temprano por la mañana, entre las 6 am y las 10 am, y luego regresar por la tarde. También es posible realizar un paseo corto después de las 4 pm y posteriormente, uno más extenso por la noche.
Durante el horario nocturno el ambiente tiende a ser más fresco y las superficies están más frías, en comparación con el resto del día. En las primeras horas de la mañana, antes de que el sol llegue a su punto más alto, el suelo también está más fresco debido a que no se ha calentado todavía.
El horario para pasear a tu perro en verano dependerá de tu disponibilidad y sus hábitos. El objetivo es perturbar lo menos posible su rutina para no afectar su comportamiento. Si alguna de las horas antes mencionadas resultan inconvenientes, por falta de costumbre o por limitaciones de tiempo, no se prohíbe salir fuera de este rango, pero no se considera lo más recomendable. En todo caso, toma las precauciones necesarias si sales en momentos que no sean los adecuados.
Además del horario, verifica siempre la temperatura del día. Por encima de los 28 °C puede ser peligroso salir de paseo para tu perro. En todo caso, limita la exposición de tu perro a estas temperaturas a tiempos muy cortos, suficientes para que hagan sus necesidades; si es esa la función del paseo.
El peor momento del día para pasear a tu perro
El intervalo entre las once de la mañana (11 am) y las tres de la tarde (3 pm) es el menos recomendable para pasear durante el verano. En este lapso de tiempo, el sol alcanza su punto más alto, lo que resulta en altas temperaturas y aumento del calor.
A pesar de la percepción de frescura en algunas zonas durante este horario, la radiación solar es mucho más directa, lo que acentúa el riesgo de elevar la temperatura corporal, quemaduras en las patas o en la piel, y golpes de calor. En algunos lugares, es mejor ampliar este intervalo y evitar paseos entre las 10 am y las 4 pm, para garantizar una mayor seguridad contra el calor extremo.
Consideraciones importantes para pasear a tu perro en verano
Protector solar:
La mayoría de las razas tienen suficiente pelaje para protegerse del sol, sin embargo, es recomendable usar cremas hidratantes y protectores solares para perros, en razas de pelaje corto. Si es una raza sin pelo, como el perro peruano o el perro crestado chino, el uso de protector solar es obligatorio, además de aplicar cremas hidratantes luego del paseo.
Superficies calientes:
Evita caminar sobre superficies muy calientes o expuestas al sol, como aceras despejadas. Estas pueden quemar las almohadillas de las patas de tu perro, causándole ampollas. Busca lugares sombreados siempre que sea posible o áreas con muchos árboles para brindar protección contra el sol directo.
Tampoco le pongas zapatos, ya que los perros regulan su temperatura a través de las patas. Puedes pensar que es una solución para atravesar superficies calientes, sin embargo, los perros sudan a través de sus almohadillas, si están cubiertas, lo único que puede generar es un aumento de su temperatura corporal y posiblemente sufrir un golpe de calor.
Antes de atravesar un lugar, coloca la palma de tu mano en la superficie para evaluar si es seguro. Siempre es preferible caminar en los parques sobre el grass, en lugar de la arena, cemento o pavimento; por el hecho de que estas superficies retienen más calor.
Hidratación:
Asegúrate de que tu perro beba agua antes de salir de casa. Durante el paseo, ofrécele agua y de vez en cuando refresca su piel con una toalla húmeda. Si al regresar a casa tu perro muestra interés en beber más agua, no se lo prohíbas. Recuerda que es la temporada más calurosa del año y han estado realizando actividad física.
Duración del paseo:
No des paseos demasiado largos o extenuantes. Si tu perro necesita quemar mucha energía debido a su raza o temperamento, puedes hacer el paseo un poco más intenso, con un trote ligero, por ejemplo. Lo que no debes hacer es prolongar demasiado el tiempo bajo el sol. Considera dar varios paseos cortos a lo largo del día en los horarios recomendados.
Observación constante:
Vigila siempre el comportamiento de tu perro durante el paseo para detectar signos de deshidratación o golpe de calor. Si notas problemas respiratorios, cansancio excesivo, babeo anormal o una marcha inestable, detén el paseo en un área sombreada, ofrécele agua fresca y espera a que se recupere antes de regresar a casa. Si los síntomas persisten, pide ayuda y acude de inmediato al veterinario.
Arnés adecuado:
Evita arneses o collares con materiales que se calienten demasiado, como aquellos con piezas de metal. Estos materiales pueden causar lesiones a tu mascota una vez que se calienten.
Corte de pelo:
Para las razas con mucho pelo o pelaje denso, considera cortes donde le reduzcan su cantidad con el fin de que no retengan tanto el calor. Sin embargo, el corte ideal está muy ligado a la raza, pues algunos perros regulan mucho mejor su temperatura a través de su largo pelaje. Consulta siempre con un profesional antes de tomar alguna decisión. Además, mantén su pelo bien peinado y sin nudos para evitar que atrape suciedad y retenga el calor.