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Para bañar a los perros en piscinas hay tomar precauciones

¿Qué hacer luego de bañar a tu perro en una piscina?

Si llevas a tu perro a nadar en una piscina, es importante tener en cuenta la influencia que puede ejercer sobre su salud, considerando los aditivos químicos presentes en el agua. Después de bañar a tu perro en una piscina, sigue estas recomendaciones:

1) Hidratación para tu mascota

Es esencial proporcionarle a tu perro agua y comida después de nadar. Dado que ha realizado actividad física, querrá recuperar energía. Si no es la hora habitual de comer, dale un pequeño refrigerio hasta la próxima comida, pero asegúrate de que tome agua.

Durante el tiempo que esté en la piscina, anímale a salir para que pueda hidratarse. Dada la temperatura y la actividad física, es probable que lo necesite.

Por otra parte, los perros suelen tragar agua de la piscina sin querer. Aunque en cantidades pequeñas no son motivo de preocupación, es importante monitorear de cerca su consumo. Darle agua mientras nada, estimula su sistema urinario, y ayuda a desechar todo lo que haya bebido de la piscina de manera más eficiente.

Si tu perro toma demasiada agua de la piscina, podría tener vómitos, náuseas, pérdida de coordinación, babeo, inflamación y dilatación de las pupilas. Ante cualquiera de estos síntomas, consulta inmediatamente a tu veterinario.

2) Baña a tu perro después de nadar en una piscina

El agua de la piscina puede afectar el pelaje y la piel de los perros debido al cloro presente en ella. Aunque el agua esté equilibrada y la cantidad de cloro sea adecuada, es recomendable enjuagar a tu perro con agua fresca o potable después de nadar, para eliminar cualquier residuo de componentes químicos que queden en su cuerpo. Con el tiempo, estos residuos causan irritación en su piel. Al momento de enjuagarlo, presta especial atención a las áreas sensibles como el rostro, orejas, hocico y vientre.

Antes de que tu perro se sumerja en la piscina, verifica las condiciones del agua. Toma en cuenta que el exceso de cloro puede irritar la piel, causando pérdida de pelo, picazón y heridas. Por otro lado, una cantidad insuficiente de cloro y otros elementos purificadores, puede contribuir a la proliferación de gérmenes y bacterias.

3) Aplicación de champú y cuidado del pelaje

Aunque el cloro esté en niveles normales, tiende a resecar el pelaje de los perros. Esto afecta especialmente a las razas con pelaje largo.

Utiliza un champú especial para perros al enjuagar a tu mascota después de nadar, para eliminar residuos químicos y revitalizar su pelaje. Un buen champú para perros debe contener nutrientes esenciales que favorecen su fortaleza y crecimiento. Consulta con tu veterinario para las mejores opciones según el tipo de pelaje o raza de tu perro. También puedes recurrir a aceites especiales para mejorar el brillo y suavidad del pelaje.

Si bañas a tu perro en la piscina con frecuencia, realiza este procedimiento una vez por semana. Si son poco comunes, enjuaga con champú después de cada baño en la piscina.

Es necesario tomar medidas después que los perros se bañen en piscinas

4) Secado y peinado

Asegúrate de secar bien a tu perro, ya que la humedad prolongada puede dañar su piel. Puedes usar un secador de pelo a baja temperatura para evitarle quemaduras.

También, peina a tu mascota para desenredar y eliminar cualquier residuo subyacente. Esto fortalecerá y mejorará la calidad del pelaje. Como tip adicional, peina a tu perro antes de entrar a nadar, para evitar que sus pelos se acumulen en el filtro de la piscina.

5) Cuidado de los oídos

Si tu perro ha pasado mucho tiempo bañándose en la piscina, puedes limpiar sus oídos para asegurarte de que no queden restos de agua en su interior. La presencia de agua residual puede causar infecciones y deteriorar su audición.

Observa si sacude la cabeza con insistencia y se desespera tratando de quitarse algo de encima, es probable que aún tenga agua en sus oídos. Normalmente, ellos mismos pueden arreglárselas. Pero, si observas que, además de sacudir la cabeza, pierde el equilibrio, la situación es mucho más complicada y debes ayudarlo a sacar el agua restante.

Para llevar a cabo la limpieza, no necesitas introducir objetos filosos dentro de su oído, ya que podrías lastimar su canal auditivo o, peor aún, dejar atascado el objeto. Apóyate en soluciones especiales de limpieza auditiva para perros. Si no sabes cómo hacerlo, llévalo al veterinario.

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