Hoy en día, las mascotas, tanto perros como gatos, han aumentado su esperanza de vida. Más que todo, porque la ciencia veterinaria ha avanzado a tal ritmo, que es capaz de tratar diferentes patologías. Sin embargo, siempre existen enfermedades como el cáncer, que pueden representar un desafío. Aun así, todavía hay diferentes soluciones y tratamientos para abordarla.
Aunque no lo creas, el cáncer es una enfermedad muy común entre mascotas adultas. A veces puede ser una enfermedad silenciosa, ya que las mascotas no pueden expresar de manera clara su malestar. En otros casos, el dueño no sabe cómo abordar posibles síntomas o un diagnóstico. Por eso, en Mascotas 365, siempre buscando ofrecer la mejor información para la salud de tu mascota, quisimos abordar este tema.
Entrevista a oncóloga veterinaria
Entrevistamos a la Oncóloga Veterinaria Dra. Kikue Tessy Tsumura sobre esta enfermedad. Ella nos cuenta su historia dentro de la especialidad, nos ofrece sus recomendaciones y consejos. También aprovechamos para conversar acerca del abordaje de uno de sus pacientes y cómo superó un posible diagnóstico.
La oncología veterinaria puede resultar un término bastante complejo para muchos propietarios de mascotas, ¿Cómo describiría su especialidad en el campo de la veterinaria?
Dra. Kikue Tsumura: Es una especialidad de suma importancia. En los últimos años, la incidencia ha incrementado notablemente.
¿Qué le motivó a especializarse en oncología veterinaria?
Mi abuelo enfermó de cáncer, de linfoma específicamente. Nos dijeron que le quedaría poco tiempo de vida, pero gracias a los avances en la medicina él pudo superar las expectativas. Por lo que al terminar la carrera, en el 2005, opté por indagar y estudiar la especialidad de oncología veterinaria, para poder ayudar a las mascotas y a sus dueños.
Entrando en tema, ¿Cómo se realiza el proceso de diagnóstico de cáncer en mascotas? ¿Cuáles son las pruebas y exámenes más comunes?
En primera instancia, la anamnesis. Es decir, conversar profundamente con los dueños y capturar la mayor información posible es importantísimo. Luego, realizar la evaluación del paciente y solicitar las pruebas necesarias para llegar al diagnóstico más preciso.
Entre las pruebas que pueden ser ecografías, rayos X, tomografías o resonancias magnéticas, para mí, lo más importante, es el estudio anatomopatológico de la lesión.
¿Cuáles son los problemas más comunes que observa cuando evalúa a una mascota?
Existen un sin fin de neoplasias. Pero entre las más comunes, están los adenocarcinomas mamarios, linfomas, melanomas. Y en gatos, los carcinomas de células escamosas.
¿Cuáles son algunas señales que los propietarios deben estar atentos?
Es de suma importancia siempre estar en contacto con la mascota. Si observan heridas que no cierran, lunares que sangran o pican. Si ven en las hembras secreción anormal por las mamas o alguna bolita que aparece de la nada y empieza a crecer, es importante llevar a la mascota a revisar. También el aliento fétido o la salivación anormal son signos de alerta.
¿Cuáles acciones pueden realizar los propietarios en casa, para detectar posibles problemas de salud en sus mascotas?
Observar siempre, los dueños son la pieza clave. Las mascotas no hablan, así que cualquier cambio significativo en su conducta o en su cuerpo, deben ser tomados con seriedad y llevar a la mascota a revisar. Es mejor salir de dudas y abordar las situaciones a tiempo.
¿Qué debería realizar un propietario ante la sospecha de un posible tumor cancerígeno?
Llevarlo a un especialista inmediatamente.
¿Cuál es el tratamiento más común en caso de detección de cáncer en una mascota?
Si la cirugía es viable, es lo más recomendable. De no ser posible, acá en Perú el tratamiento más asequible es la quimioterapia.
¿Tiene algún consejo para los dueños que enfrentan el diagnóstico de cáncer en sus mascotas?
Estamos para ayudarlos. El cáncer sí se puede curar. Hay que mantener la calma y seguir las instrucciones brindadas. Recuerden que el flujo de comunicación y confianza es básico para obtener resultados positivos.
¿Qué medidas preventivas pueden tomar los propietarios para reducir el riesgo de cáncer en sus mascotas?
Llevarlas a su control anual es lo primero que debemos hacer. Así mismo, evitar exponerlos a los rayos UV, brindarles alimentos de alta calidad, controlar su dieta. Si tenemos una mascota es para estar con ella, así que siempre pido que los toquen, observen. Son los dueños los que conocen a sus mascotas más que cualquier especialista. Si sienten o ven algo raro, llévenlos al veterinario.
¿La raza influye en el desarrollo de la enfermedad?
Sí, por supuesto, hay razas más predispuestas que otras. En el caso de los perros, están el Bóxer, Rottweiler, Labrador o Schnauzer.
Desde su posición como oncóloga veterinaria, ¿Cómo propone ayudar a las familias que atraviesan por el proceso?
Acompañarlos en todo momento durante el tratamiento. Pero también guiarlos para que recuerden que la prioridad de mi trabajo es brindar calidad de vida. Entiendo su dolor y a veces como dueños nos aferramos a la vida, pero si el paciente sufre, también es mi labor ayudarlos a ver que el fin de nuestra carrera es velar por el bienestar de nuestros compañeros de cuatro patas.
En ese sentido, ¿Cuál es la parte más gratificante de su trabajo?
Crear lazos que se vuelven amistades. Ver a mis pacientes vivir y que vengan a saludarme de cuando en cuando.
Para terminar, déjenos un consejo o recomendación que quiera darle a toda nuestra comunidad de pet lovers
¡El diagnóstico de cáncer no es una sentencia! Es una enfermedad con tratamientos largos. Pero no nos abrumemos, día a día, vamos a ver resultados. Sé que es mucha información a veces, pero comunicándonos y confiando en que el fin es que la mascota esté bien, vamos a ver resultados positivos.
La historia de Candy
Candy es una Jack Russell de 10 años de edad. Sus dueños notaron una bolsa en su ingle, cerca de su pata posterior, que estaba inflamada. Cuando notaron esta anomalía, la llevaron a revisión veterinaria donde fue referida con la Dra. Kikue Tsumura para su diagnóstico y tratamiento. A continuación su relato:
¡Claro que recuerdo a Candy! Candy llegó derivada por Dr. Victor Santhome. Ella presentaba una lesión (protuberancia) a nivel inguinal izquierdo, sospechoso de un ganglio reactivo. Sin embargo, ya había sido tratada con corticoide y no hubo respuesta positiva.
A la palpación no había dolor, pero la lesión sugería algo patológico. Por lo cual, antes de realizar cualquier maniobra, se solicitó una ecografía a la zona para ver sus características. En la ecografía, se corroboró la sospecha de una reacción ganglionar, pero el resto de ganglios estaban bien, por lo cual se sugirió la resección de la masa.
Opté por no punzar por temor a activar cualquier malignidad. La masa había crecido y era totalmente resectable. Realizamos la cirugía con su veterinario, el Dr. Santhome. Se retiró la masa y la muestra se analizó. Por suerte el diagnóstico fue benigno y Candy nos acompaña hasta hoy.
Cabe mencionar que si bien salió benigno (se trataba de un lipoma), la zona es complicada. Normalmente, hay mucha irrigación, y si ese lipoma seguía creciendo podía complicarse causando la inflamación de la pata por acumulación de líquidos. Generando problemas para desplazarse y dañando su calidad de vida.
Actualmente, Candy se encuentra libre de peligro y compartiendo con sus dueños sin ninguna secuela. Su historia nos demuestra lo importante que es la detección temprana y como, siendo dueños, debemos estar atentos para tomar decisiones oportunas.
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