Existen ciertas razas de perros ideales para personas silenciosas. Son perros que no sienten la necesidad de ladrar constantemente, o lo hacen solo cuando consideran que hay algún peligro. A continuación, te presentamos algunas de estas razas de perros que disfrutan del silencio y la tranquilidad:
Basenji
Los basenji son conocidos en todo el mundo por su falta de ladrido. En realidad, no es que no puedan ladrar, sino que su ladrido se asemeja más a un aullido. Tiene un parecido a un canto tirolés, debido a que su laringe es diferente a la de otras razas. Aunque, sí pueden gruñir como cualquier otro perro.
Son muy cariñosos con sus dueños, pero reservados con los extraños, por lo que requieren socialización temprana. Suelen ser muy limpios, ya que se asean por sí mismos, especialmente teniendo en cuenta que tienen un pelaje corto que les gusta lamer. Debido a su independencia, sus hábitos de aseo personal y su falta de ladrido, muchos dueños los comparan con los gatos.
Se considera una de las razas más antiguas, con orígenes en África, donde solían cazar en manadas silenciosas. Las tribus humanas tenían por costumbre colocar campanas para detectar su presencia. Se cree que están emparentados con los parias de la India y los perros del antiguo Egipto. Los especímenes actuales son excelentes para la caza debido a sus antecedentes.
Akita
Estos perros disfrutan mucho de la atención y se aburren fácilmente si no se les da algo que hacer. No se recomiendan para dueños primerizos, por su fuerza y obstinación. Requieren socialización temprana, puesto que no les gusta compartir su espacio con otros animales. Además, debido a su instinto protector, podrían ser muy reactivos ante extraños. A pesar de que siempre están alerta, no se caracterizan por ladrar en exceso. Solo lo hacen en situaciones verdaderamente extrañas o fuera de lo común. El Akita vigila mejor manteniendo el silencio.
Borzoi
Tienen un origen interesante. Algunos lebreles fueron llevados a Rusia para cazar lobos, pero no sobrevivían al clima. Los lebreles en lo sucesivo se cruzaron con perros nativos, para que pudieran resistir las condiciones climáticas extremas. De ahí su apariencia actual, que podrían describirse como galgos con pelo largo y sedoso.
Fieles a su herencia como lebreles, les gusta correr y necesitan espacio para hacerlo, pero también requieren del estímulo para moverse; de lo contrario, pasan el día descansando en casa. Aun así, mantienen sus instintos de caza, y pueden perseguir animales pequeños; cabe destacar que no se llevan bien con los gatos. Les gusta aprender trucos por diversión y es probable que te imiten mientras les enseñas, pero pierden interés una vez que se aburren. Disfrutan del silencio y, aunque son buenos vigilantes, solo ladran cuando es necesario.
Cuando se popularizaron en Rusia por su aspecto exótico, fueron muy apreciados por la aristocracia, lo que llevó a que casi toda la corte rusa tuviera un ejemplar, y se exportaran a otras cortes europeas. Gracias a esto, se cree que de alguna manera son perros acostumbrados a la realeza, debido a que mantienen un comportamiento pasivo y dócil.
Cavalier King Charles Spaniel
Esta es otra raza que tiene relación con la aristocracia. El Cavalier King Charles Spaniel fue creado para ser un perro de compañía, por lo que se seleccionaron los ejemplares más tranquilos, dóciles y silenciosos en el proceso de reproducción. De allí que los ejemplares actuales se mantengan en silencio, además, de que siempre quieren complacer a sus dueños. Por lo general a los Cavalier les gustan los ambientes tranquilos y sin ruido. Requieren un mantenimiento alto debido a su pelaje y son propensos a sufrir ansiedad por separación.
Shar Pei
Fáciles de reconocer por los pliegues en su rostro y cuerpo. Las variedades más comunes de esta raza son las de pelo corto y áspero, pero también existe una tercera variedad con pelo largo, que destaca debido a su combinación con los pliegues faciales.
Son perros medianos muy territoriales que necesitan socialización desde cachorros si van a vivir con otros animales. Son muy obedientes y afectuosos con sus dueños. Asimismo, necesitan ejercicio regular, ya que tienden a la obesidad. Al igual que otras razas de perros silenciosos, tienen un fuerte instinto protector y vigilante, pero no ladran a menos que haya una razón importante.
