Los perros mexicanos presentan una amplia diversidad, producto de la mezcla de razas prehispánicas, europeas y asiáticas. Desde el Xoloitzcuintle, símbolo milenario, hasta el popular Chihuahua, la raza más pequeña del mundo. Estas razas encarnan la variedad, tradición y encanto único de México.
Xoloitzcuintle o Xolo
También conocido como Perro sin pelo mexicano, es una raza antigua que se remonta hasta hace más de 3000 años atrás, cuando fueron venerados por las diferentes civilizaciones que ocupaban el territorio mexicano., siendo muy populares entre los Aztecas. De hecho, todavía se cree que son estos perros los que guían a los muertos hacia el más allá cuando dejan su vida terrenal.
Se asemeja mucho al Perro peruano sin pelo, compartiendo características físicas y de temperamento. Sin embargo, tienen sus diferencias. Por ejemplo, la piel del Xoloitzcuintle puede ser moteada, mientras que el perro peruano suele presentar colores sólidos. Debido a la antigüedad de ambas razas, es probable que desciendan de una especie común que habitaba todo el continente americano.
Chihuahua
Los chihuahuas siempre han estado presentes en el imaginario colectivo. Es la raza latina más popular y conocida en el mundo, tanto por su temperamento como por su peculiar imagen. Son descendientes de los Techichi, una raza ya extinta desarrollada por los Aztecas. Aunque su nombre se refiere a la región de Chihuahua en México, realmente no hay datos históricos que indiquen que este sea el lugar de origen de la raza. Aunque en el momento en que se popularizó, la mayoría de los ejemplares provenían de allí.
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Perro Lobo Mexicano o Calupoh
Aunque no existen registros concretos acerca de la aparición de esta raza, se sabe que durante muchos siglos se cruzaron lobos grises con diversos perros de la región, hasta el siglo XVI que se detuvo esta práctica. Se han encontrado restos de estos animales en lugares sagrados como la pirámide de la Luna o el Templo Mayor en Tenochtitlán. Esto hace pensar que esta raza se creó gracias a los primeros pobladores de la región, como ofrendas, dándoles algún significado espiritual. Desde hace aproximadamente 30 años se decidió recuperar la raza a través del cruce selectivo de diferentes perros lobo.
Es un perro de tamaño grande con un gran parecido a los lobos. Suelen tener el pelaje oscuro, siendo el estándar de la raza los de pelo negro con ojos amarillos o claros. Tiene un temperamento dócil y tolerante, ideal para familias con niños. Le gusta jugar, mantenerse ocupado y estar rodeado de su familia. Por lo que puede resultar tímido ante extraños. Es ideal tener a esta raza en un lugar con espacios abiertos para que corra y juegue con tranquilidad.
Perro Chamuco o Pitbull Mexicano
“Chamuco” es una palabra que para los mexicanos significa “demonio” o “diablo”; lamentablemente, esta raza recibe ese nombre debido a su apariencia y temperamento. Se cree que es una variedad del American Bull Terrier, que llegó a México para ser cruzado con otras razas parecidas y lograr que se adaptara a las condiciones ambientales del lugar. Tristemente, la razón de su cría en el país fue para su uso en peleas callejeras, lo que ha resultado en que algunas especies presenten problemas de agresividad heredados de esa época.
Tienen una constitución molosa con grandes músculos. Aunque son más pequeños en comparación a otros molosos, son muy atléticos y fuertes. Sin embargo, si no se les proporciona ejercicio regular, pueden sufrir de obesidad. Al igual que otras variantes de pitbulls, son muy cariñosos, amables, inteligentes, leales y protectores de su entorno, pero con un gran carácter cuando se sienten amenazados.
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