Muchos cat lovers han observado que sus felinos comienzan a ronronear cuando están contentos o cómodos. Aun así, no existe una explicación definitiva sobre cómo producen este sonido ni las verdaderas razones por las que lo hacen. A continuación, intentaremos descubrir qué se esconde detrás del ronroneo de los gatos.
¿De dónde proviene el sonido?
Aún no hay un consenso con respecto al origen de este sonido. Una teoría explica que se produce a través de los músculos de la laringe, que expanden y contraen la glotis. Otra teoría habla de que el pecho de los gatos funciona como una especie de caja de resonancia para sus cuerdas vocales. Cuando ronronean, los gatos lo que hacen es vibrar sus cuerdas vocales y el sonido es amplificado por el pecho.
Tomando en cuenta ambas explicaciones, el ronroneo podría razonarse de la siguiente manera: Cuando el gato siente el estímulo, su cerebro envía una señal a la laringe haciendo que esta vibre. Debido a la respiración natural del animal, el aire que pasa por la laringe mientras vibra, produce un efecto en cadena, haciendo que sus cuerdas vocales también vibren. Allí se crea el sonido que conocemos como ronroneo.
El estímulo que recibe el gato puede ser una caricia sobre su cabeza. Pero las razones por las que un gato ronronea pueden ser diversas, ya que, se han encontrado gatos que ronronean estando solos.
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¿Qué significa el ronroneo?
A continuación, te presentamos las explicaciones más comunes para el ronroneo de los gatos:
1) Están felices:
La asociación más común con el ronroneo de los gatos es que expresan su felicidad. Lo hacen cuando reciben cariño, están cerca de su dueño, juegan con su juguete favorito o comen. En general, es una manera de demostrar que están contentos con la actividad que realizan en ese momento.
2) Están marcando su territorio:
Además de mostrar su agrado, si ronronean mientras se frotan contra ti, significa que te están marcando con sus feromonas como “suyo”. Este comportamiento también se observa cuando marcan ciertos lugares de la casa.
3) Una forma de comunicación temprana:
Los gatos comienzan a ronronear apenas unos días después de nacer, lo que sugiere que aprenden a hacerlo como una forma temprana de comunicarse con sus madres. Este tipo de comunicación persiste durante toda su vida adulta, incluso cuando no tienen a sus madres cerca o no necesitan expresar algo en particular. Es un acto reflejo aprendido en la infancia temprana. Similar a cómo algunos humanos adultos aún repiten comportamientos retenidos desde la niñez, aunque ya no los necesiten.
4) Comunicarse con otros gatos y con los humanos:
A pesar de que el ronroneo no se ha demostrado como una forma primaria de comunicación, combinado con otras maneras de expresión se convierte en una herramienta comunicativa. Los gatos pueden ronronear, además de maullar, o tomar ciertas posturas corporales, cuando se encuentran con otros gatos. También pueden hacerlo para llamar tu atención. Pese a que el maullido sigue siendo la principal manera que tienen los gatos de decirnos que quieren algo, son capaces de combinarlo con el ronroneo.
5) Sirve para relajarse:
Se cree que el ronroneo de los gatos les proporciona calma. Pueden ronronear en situaciones de estrés o miedo; de hecho, pueden ronronear incluso en momentos de gran malestar, lo que sugiere que este sonido les ayuda a relajarse. La relación entre este comportamiento y el ronroneo por felicidad es análoga a la sonrisa humana: sonreímos porque estamos felices, pero también podemos hacerlo para relajarnos en situaciones de estrés, o, en situaciones sociales, para ocultar nuestras verdaderas emociones.
6) Están enfermos:
Siguiendo con el punto anterior, si observas que tu gato ronronea con insistencia junto con otros síntomas como cansancio constante, pérdida de apetito, pérdida de peso, cambios en su comportamiento o problemas digestivos, es una señal de que está enfermo y necesita atención veterinaria.
7) Quieren sanar a su humano:
Se ha descubierto que la vibración del ronroneo de los gatos puede facilitar la unión de huesos rotos, reducir la presión arterial y disminuir el estrés en los humanos. Basado en estos beneficios, se cree que los gatos pueden detectar la tensión, ansiedad o nerviosismo que siente su humano bajo estas condiciones y deciden ronronear para aliviarlo.
